Desde 1900, Gillette se compromete a la producción de cuchillas eficientes y de alta calidad en versión “desechable”. El objetivo de la empresa es inspirar al hombre a mejorar constantemente, ofreciendo un afeitado impecable y tratando de dejar un mundo mejor para las generaciones futuras. Precisamente por esto, Gillette está trabajando para minimizar el impacto ambiental, produciendo envases reciclables y otorgando a las maquinillas una mayor eficiencia para durar más tiempo.